Bendice, alma mía, a Jehová, Y no olvides ninguno de sus beneficios.@Salmos 103:3
retrato
Enrique S. Turrall (1867–1953)

En­ri­que S. Tur­rall (1867–1953).

Le­o­ni, me­lo­día tra­di­cio­nal he­brea; trans­cri­to, Me­yer Ly­on, cir­ca 1770 (🔊 pdf nwc).

Bendice, ¡oh alma mía! A Jehová tu Dios,
Y no te olvides de ensalzar su grande amor
Pues él te perdonó Tu mucha iniquidad;
Y al ver tu angustia y contrición, Te dio su paz.

Tu vida rescató de la condenación,
Y te corona de favor y bendición.
El quiere enriquecer tu vida espiritual;
En alas de esperanza y fe remontarás.

Un miserable soy, indigno pecador,
Mas por la fe en mi Salvador, mi Padre es Dios.
Su Espíritu obra en mí y no me dejará;
Al acabar mi vida aquí veré su faz.